Cómo establecer los límites éticos de la comunicación científica: 8 requisitos clave

Una directiva alemana para guiar las buenas prácticas y sancionar la mala praxis en comunicación pública de la ciencia.
convocatoria fecyt

Dado el impacto de la comunicación científica en la sociedad, decidir qué información comunicar, con quién y cómo comunicarla implica diferentes consideraciones éticas, pero ¿cómo establecer los límites éticos de la comunicación científica profesional?

Más allá de posibles conflictos de intereses o la falta de transparencia de algunas “colaboraciones” con medios o influencers, hay cuestiones más complejas como las que planteaba el profesor de comunicación científica Alexander Gerber: ¿Cruza una universidad el límite ético cuando anuncia un "gran avance" sin referirse a estudios replicados de otras instituciones que llegan exactamente a la conclusión opuesta? ¿Lo hace al no abordar explícitamente la validez estadística y las posibles limitaciones metodológicas de un resultado de investigación? Lo cierto es que resulta muy difícil trazar límites éticos claros y, más aún, controlar su cumplimiento.

El aumento de denuncias de casos relacionados con mala conducta en comunicación científica —especialmente durante la pandemia de COVID— hizo que Alemania diera un paso importante en este ámbito. En 2022, el Consejo Alemán de Relaciones Públicas (DRPR) aprobó una directiva con recomendaciones específicas para instituciones, personal investigador y profesionales de la comunicación en lo que se refiere a este ámbito. Esta directiva se elaboró en un proceso participativo de un año de duración y, a diferencia de guías anteriores, tiene poder sancionador. Las quejas se envían a un Consejo compuesto por un grupo de personas expertas que evalúan cada caso y, dependiendo de la gravedad del incidente, pueden emitir una amonestación pública.

Además, la normativa tiene en cuenta un aspecto especialmente relevante: el de las relaciones de poder que afectan a la comunicación científica. En este sentido, la directriz recomienda que las y los comunicadores estén ubicados en la jerarquía de su institución de tal manera que puedan “hacer cumplir de manera responsable” las pautas de comunicación. Solo “en igualdad de condiciones” con la dirección científica pueden los comunicadores decir "no" a un tema, aunque éste haya sido sugerido por el decano o el vicepresidente, plantea Gerber.

Si bien este tipo de iniciativas pueden ser muy útiles para establecer una serie de normas generales y suponen un gran avance a este respecto, el ejercicio de la comunicación científica requiere una reflexión constante sobre la responsabilidad ética de nuestro trabajo.

Puedes consultar la directiva aprobada en Alemania en su versión completa en inglés o, si lo prefieres, te la resumimos a continuación:

✅ Requisitos éticos

  1. Fidelidad de los hechos

    Quien difunde conocimientos tiene la responsabilidad de hacerlo desde la veracidad. Las exageraciones, omisión de información importante (referida al propio hecho o a su contexto), la ocultación o minimización de riesgos son inadmisibles.

  2. Comprensibilidad

    La comunicación orientada al gran público debe realizarse de forma comprensible para garantizar el intercambio de conocimientos con otros agentes sociales. La simplificación, generalmente necesaria para garantizar la suficiente claridad, no debe implicar la comunicación errónea de ningún hecho. Además, debe explicarse el contexto, proceso y métodos de trabajo científicos.

  3. Filtro de relevancia social

    Es necesario filtrar cuáles son las informaciones de mayor relevancia para el público, de entre la multitud de información disponible.

  4. Contar historias

    Ilustrar los hechos con ejemplos, historias o analogías es una forma legítima de didáctica y a menudo facilita la comprensión de los hechos por parte del público. Del mismo modo, es legítimo centrase en los contenidos esenciales. Sin embargo, no hay que hacer concesiones en cuento a la exactitud de los hechos.

  5. Mayores requisitos de transparencia

    Las fuentes, personas de contacto, asesorías, dependencias financieras de cualquier tipo, etc. deben declararse de forma transparente. La metodología debe describirse de forma precisa y comprensible.

  6. Preprints

    Por regla general, las publicaciones deben haber sido sometidas a un proceso de revisión por pares antes de ser comunicadas. Los preprints solo pueden comunicarse si se demuestra que existe un interés público en una determinada información rápida. En este caso, los resultados deben designarse explícitamente como preliminares y clasificarse en consecuencia. Tan pronto como esté disponible la revisión, debe realizarse una actualización.

  7. Comunicación de la incertidumbre

    Las conclusiones de la ciencia son válidas hasta que son complementadas, confirmadas, superadas o revisadas por nuevos conocimientos. Por tanto, siempre hay que hacer visibles los límites de las afirmaciones y los métodos de investigación.

  8. Interacción respetuosa y cooperación constructiva

    La comunicación científica requiere conciencia de diálogo abierto y respeto por las posturas de todos los participantes.

👤 El papel del personal investigador y profesionales de la comunicación

  1. Responsabilidad de la dirección

    Las y los profesionales de la comunicación deben ocupar una posición jerárquica en sus instituciones de forma que puedan aplicar las directrices de comunicación de forma responsable. Esto solo puede hacerse si se está a la misma altura que el personal investigador y se tiene la posibilidad de rechazar encargos de manera justificada.

  2. Funciones de asesoramiento y dirección

    Quien comunica debe asumir un papel de asesoramiento y, en cierta medida, de dirección con el personal científico y directivo de sus instituciones. Las personas portavoces deben recibir información de los riesgos que corren al comunicar públicamente (ej. difamación) y de las medidas de protección que pueden adoptarse. El personal investigador que comunica necesita apoyo con esta labor.

  3. Comparecencias en público

    Qué voces son escuchadas no debe depender solo del talento mediático y el carisma de personas concretas. Antes de comparecer ante medios, hay que comprobar el formato y entorno para garantizar que el contenido científico se transmite con veracidad.

¿Qué te parecen estas directrices? ¿Coinciden alguno de los asuntos tratados con cuestiones que te planteas en tu práctica diaria? ¿Sobre qué otros asuntos reflexionas en tu día a día profesional? Déjanos tus respuestas en Twitter

Si te interesa la ética de la comunicación de la ciencia, puedes leer este otro artículo del blog en el que reflexionamos sobre cómo tener en cuenta los impactos sociales negativos de la investigación sin sobrepasar los límites de la censura.

Etiquetado en: